La Asociación Protectora de Animales Galgos del Sur ha rescatado a siete cachorros de galgo que fueron tirados como basura dentro de una caja junto a un contenedor situado en la localidad de Guadalcázar (Córdoba).
Una mujer que colabora con la protectora dio aviso y ese mismo día Galgos del Sur se hizo cargo de ellos y los acogió en su refugio, donde reciben todos los cuidados y la atención veterinaria necesaria y donde permanecerán hasta que puedan ser dados en adopción a una buena familia que les quiera de verdad.
Galgos del Sur asegura que estos siete cachorros forman parte de la larga lista de desechos de perros que la caza produce cada año, tanto al final de la temporada como antes y al inicio de la misma. “Para estos cachorritos, su condena ha sido haber nacido justo antes de comenzar la temporada de caza, que empieza en octubre. Se trata de cachorros que ya no los van a poder utilizar para cazar esta temporada y ni siquiera pueden probarlos para ver si valen o no para la caza. Así que estos cachorros no les resultan útiles y los galgueros no los quieren mantener”, explica la presidenta de Galgos del Sur, Patricia Almansa.
Almansa hace hincapié en que no es, ni mucho menos, la primera vez que la protectora recoge en septiembre cachorros de galgo, podenco y otras razas utilizadas habitualmente en la caza. “Por desgracia para nosotros y para otras muchas protectoras de animales, esto es habitual cada año. Hay madres que paren a destiempo y los plazos no coinciden con los que a los cazadores les gustaría para poder explotarlos. Quieren utilizar a las madres durante la temporada de caza y lo más fácil es desprenderse de sus cachorros, incluso siendo así de pequeños. Es una práctica cruel e inhumana”, afirma. “Cuando no son tan pequeños como éstos, en muchos casos los prueban antes de desprenderse de ellos. Si presentan buenas cualidades para cazar, puede que se los queden para explotarlos en las siguientes temporadas. Y si no valen, pues se deshacen de ellos de formas muy diversas y crueles que ya resultan bien conocidas”, añade.
Por último, Almansa lamenta que el Gobierno de España dé la espalda a los galgos y el resto de perros de caza y ampare el maltrato animal que sufren desde que nacen por el mero hecho de ser considerados como herramientas de trabajo: “Especialmente ahora que el PSOE ha presentado una enmienda a la Ley de Protección y Derechos de los Animales para excluir de la misma a los perros de caza como si fueran animales de segunda y sin derechos”, concluye.